Unidad 3

La arquitectura en la historia 1

Los orígenes de la arquitectura se remonta a la prehistoria, rondando al año 1.200.00 a.C, cuando se construyen las primeras cabañas para resguardarse de los fenómenos meteorológicos.

Unos 40.000 años después se empezarán a destinar espacios para actividades especificas, como sitios para los enfermos y ancianos, o incluso sitios destinados al sepulcro de los muertos.

En el año 40.000 a.C se localizan cabañas con una estructura que probablemente cubrían con pieles. Estas eran grandes y podían alojar a amplios grupos familiares.

la primera gran ciudad la encontramos en Turquía, en el año 5.500 a.C, la cual habitaba hasta 10.000 habitantes, formando una gran comunidad.

1.500años después se construyen ciudades importantes y de gran tamaño, como Mesopotamia. Las viviendas se hacían de adobe o ladrillo.

En el 3.500 a.C encontramos a la civilización egipcia, que gracias a la calidad de vida que tenían, fue una civilización duradera y muchas de sus construcciones nos han llegado a nosotros. Entre ellas templos (edificio público más importante) y pirámides (destinadas al culto a los muertos).

Los antiguos griegos los situamos entre los años 1.200 al 145 a.C. Estos toman como referencia la arquitectura egipcia y la mejoraron. Buscan la excelencia, el equilibrio y se trabajaban cuidadosamente los mejores materiales para satisfacer a los dioses y honrar a la polis.

Los Romanos aparecen en el 1.100 a.C. Su arquitectura es la del espacio interior cerrado, pero también el exterior a una escala grandiosa. Con el descubrimiento del hormigón, los arcos, las bóvedas o las cúpulas fueron capaces de cubrir grandes espacios. Hicieron grandes avances en la ingeniería. Crearon carreteras, puentes, acueductos…

Con el S.II d.C comienza la Edad Media. Lo que queda del imperio romano se va cristianizando. Las iglesias y otros edificios religiosos se convierten en la única arquitectura importante. A partir de las arquitecturas griega y romana, se desarrolla el lenguaje clásico de la arquitectura, característico en esta etapa y después continúa desde el renacimiento hasta la edad moderna.